Uno de los pocos puntos rescatables que dejó la reciente edición de Animate fue la segunda visita a nuestra ciudad del gran dibujante español.

Entrevista a Carlos Pacheco

17/06/2014

| Por Leandro Paolini

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carlos pacheco 3Me llama Andrés y me pregunta si quiero ir a entrevistar a Pacheco. No soy cholulo de los artistas, pero cómo no tomarme un café con uno de los autores de Avengers Forever (saga que leí 3 veces en mi vida y quizás sea la mejor historia de los Vengadores).

Llegué al paquete Hotel Boca, me anuncio en recepción y Pacheco no había sido notificado que lo iba a ir a entrevistar (quienes lo trajeron al país, son coherentes, siempre hacen todo igual…). De todas maneras, Carlos accedió a bajar a tomarse un café y hablar de historieta, ni bien terminase de hablar con su familia en España.

avengers-forever-cLo esperé y a la media hora aparece, a los gritos: “¡Leandro, no sabes lo que me ha pasado!”. Resulta que Carlos – vistiendo su campera de cuero – baja del ascensor y otro periodista lo confunde con un músico, lo comienza a entrevistar y a la media hora, ambos se dan cuenta que están en una entrevista equivocada. Finalmente Pacheco me encontró y nos pusimos a hablar de política, fútbol…y comics.

Aunque hacía 15 años que el dibujante, que ahora reside en Madrid (“una ciudad que es una suma de pueblos”), no pisaba Buenos Aires (que lo recibió de manera accidentada ya que su habitación no estaba lista), habla y se maneja en Baires como un porteño más (“porque la birra es esa medicina universal que todo lo cura”).

arrowsmith-carlos-pacheco-kurt-busiekMás allá de que chorrea amor por Marvel (“aunque sus personajes me son cada vez más ajenos”) – los intereses de Pacheco son muchos y su creatividad no sólo se restringe al arte, sino que también continúa escribiendo proyectos personales y penetrando el mundo del cine.

Se define como un hombre de pueblo: “no me hallaría en New York, quiero ir a ver a mis amigos, que nos sorprendamos, a la hora que sea sin tener que hacer una cita”. Acostumbrado a “la vida improvisada y desenfadada”, Pacheco se siente cómodo trabajando para Estados Unidos, mientras vive en una sociedad en estado de convulsión constante –recientemente afectada por la abdicación de su rey– y movilizada por los grupos de reivindicación de causas de justicia social, con los que simpatiza el autor (“son tiempos interesantes”).

Obligado por su hijo a interesarse un poco más en el fútbol, confiesa que va a disfrutar muchísimo viendo hundirse a la Selección Española (“creo en el hambre, en la motivación del éxito que viene del hambre, y estos lo han perdido”), mientras se restringe a trabajar sólo en un título por mes (“trabajo bien con un título, si me aburro lo dejo, y luego regreso, pero siempre trabajo con uno”).

Sus proyectos personales para el campo de la historieta los quiere desarrollar en Europa, y charla asiduamente con Joe Kelly para tratar de publicar lo suyo en países como Francia. Su principal razón: la falta de sexo en el comic (“falta sexo en el comic, no desde lo genital, sino desde lo natural, la presencia del sexo en TV está integrada, mientras que en el comic se le sigue dando la espalda, y por eso pienso en Europa; en Estados Unidos no sería posible”).

bome4fLa música es parte de su vida, se nota su gusto por ella, en sus analogías (y hasta en su vestimenta): “Pienso un equipo creativo como una banda de rock. El guionista y el artista son el cantante y el guitarrista. El bajista y el baterista son el entintador y el colorista. Si el equipo creativo, la banda, está engranado, si comparte sensibilidades, todo sale bien. Jesús Merino es como mi bajista, o segunda guitarra, y a él lo tengo presente para la próxima banda de Arrowsmith”. Y sí, con eso Carlos confirmó que una vez que termine con Captain America, retoma Arrowsmith, como una secuela de lo ya publicado (“Ahora que resolvimos los problemas de calendario -de los integrantes de la banda- podemos retomar esa historia. Kurt Busiek estuvo enfermo un año, yo no le pude decir que no a Dan Didio para hacer Superman, así que ahora es el momento de volver a Arrowsmith, a través del sello Vertigo y sobre todo porque se acerca el 2015 que es integral para la historia por el centenario de la Primera Guerra Mundial”).

Más allá de su contrato de exclusividad con Marvel, tiene aclarado sus tiempos y espacios para el desarrollo de proyectos personales. Con lo cual, deja Captain America un tiempo, retoma Arrowsmith y cuando termine la mencionada saga de Vertigo/Warner, retoma Captain America, con el argentino Mariano Taibo en tintas (para este futuro regreso al título de Remender, Pacheco rechazó regresar a The Avengers con Jonathan Hickman, una verdadera pena).

Captain-America-14-1Si bien su idea es seguir trabajando con el editor Tom Breevort, su verdadero sueño es volver a trabajar en Fantastic Four (“Todo el universo Marvel se debería desprender de ese título”). Confeso fanático de Ben Grimm y amante de los años de John Byrne en la primera familia de Marvel, Pacheco se resiste a que cancelen dicho título y cambien sus trajes (“Esos nuevos uniformes rojos me caen fatal como el pijo de mierda de Johnny Storm. Los Cuatro Fantásticos deberían ser la punta de lanza de la editorial, el Universo Marvel se descubre en los Fantastic Four y se cimienta en Vengadores. Sueño con la idea de hacer algo como Fantastic Four Forever, ahora que los ajustes de los cambios temporales no están mal vistos”).

Si  bien espera que Arrowsmith sea llevada al mundo audiovisual, no le gusta mucho la relación de la historieta y el cine (“Los comics ahora son usados como trailers del cine, eso está mal. Se usa a los comics de manera artificiosa. En el poster del 75 aniversario de Marvel, dibujado por Greg Land, no están los X-Men y los Fantastic Four porque Marvel no tiene los derechos para hacer sus películas. Eso no lo entiendo. Que una editorial le de la espalda así a sus personajes es una claudicación, como que DC le de la espalda a Superman”).

UncannyConsidera que tiene amigos en el medio, como Jesús Merino y Joe Kelly, aunque se confiesa una persona de pocos amigos, pero tiene en claro que no se puede ser amigo de los editores (“si un jefe le dice a un editor que me eche, el editor me echa, y un amigo no echa a un amigo”).

En relación al mundo de la historieta en sí, Pacheco reconoce que es un mundo donde al figurar el nombre de uno, existe una lucha de egos, pero lo que más lo “cabrea” es la percepción general de cierta gente (dentro y fuera del mundo de la historieta), que encasilla la labor con el gusto personal (“muchos no entienden que uno puede trabajar con superhéroes e igual disfrutar de Breccia o Mandrafina”).

Su devenir diario no depende de él: “depende de la puta página, porque hay páginas más o menos difíciles, y yo siempre busco una manera distinta de dar un puñetazo o portar un arma, etc”. Es un artista nocturno, que trabaja en su oficina montada en su hogar, con sus actividades diarias, normales, pero con la prioridad en el trabajo (“y aunque me lleve tres horas hacer una mano, bueno, me tomo ese tiempo y lo hago, sobre todo de noche, porque la noche da un momento para la creación y porque ya nadie te llama por teléfono”).

Superman655Aunque sólo hace commissions “entre proyecto y proyecto”, le gusta hacer commissions para las convenciones porque asistir a las mismas lo vincula con los fans y los colegas de la industria (“aunque las redes sociales han eliminado al editor como intermediario y uno ya se vincula con los fans mediante las mismas, igual disfruto de venir a convenciones; las redes sociales y fenómenos como el crowd-funding me resultan interesantísimos, aunque todo tiene su lado oscuro, como que los autores noveles no los beneficia tanto el crowd-funding como a los conocidos”).

En el cierre de la entrevista, y específicamente hablando del medio de la historieta de superhéroes, Carlos Pacheco tiró frases tan devastadoras como las viñetas que supo crear para Arrowsmith: “He llegado a la conclusión de que el fan del superhéroes no es fan de los comics; en su mayoria sólo lee comics de superhéroes. No leen al Príncipe Valiente. A mi me gusta el comic y el comic de superhéroes, pero no me siento obligado a que me tengan que gustar las películas de superhéroes. Sin embargo, lo que me gusta del género de superhéroes es su calidad transversal. Me crié con la Marvel donde cada título tenía su tono, donde los comics del Doctor Strange no tenían nada que ver con los Cuatro Fantásticos o los Vengadores. Fantastic Four era como Tierra de Gigantes, como las series de ciencia ficción de los´60, y por otro lado los X-Men de Claremont tenían ese componente de épica Julio Vernesca donde estos mutantes tenían una aventura en la Tierra Salvaje. El ejemplo perfecto de la transversalidad del comic de superhéroes son los New Teen Titans de Wolfman y Perez, donde saltas de lo detectivesco del Contrato de Judas, a la emoción de ¿Quién es Donna Troy?, a una aventura de horror con Trigon, o una aventura en el espacio con Starfire. Por eso estoy en el género del superhéroe. El mainstream de hoy es pop y yo estoy ahí porque todavía se considera que hace falta alguien que haga algo de rock”.

Como diría Stan «the Man» Lee, “´Nuff said!”.

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