Juvenal fue un poeta romano que satirizó la acción de los líderes que ponían guardias para asegurar la castidad de sus mujeres, con una simple pregunta: “¿Quién vigila a los vigilantes? La mujer piensa de antemano y comienza con los guardias antes que con los amantes”. Alan Moore y Dave Gibbons alteran esta cuestión en Watchmen y la llevan hacia el tema de la seguridad y el género superheroico en los comics.
Watchmen and Philosophy es el segundo libro que leí de la serie editada por Blackwell Philosophy and Pop Culture, y el segundo libro que también reseño para Intertextos (el otro fue Batman and Philosophy, reseñado en Septiembre de este año). Watchmen and Philosophy es un texto también sólo publicado en inglés y es un poco más corto que el libro de análisis del encapotado, menos técnico y más conciso. A la altura del ya mencionado y reseñado texto.
Si no leíste Watchmen, no tiene sentido que leas este libro que te invita a pensar y re-pensar muchos dilemas morales y filosóficos de la obra de Alan Moore y Dave Gibbons. Ahora, si leíste la novela gráfica que muchos pensamos como la mejor historieta de superhéroes jamás escrita, te va a gustar mucho este texto de razonamiento, aunque no seas un experto en filosofía.
Así como en Batman and Philosophy me atrapó mucho el estudio de los temas vinculados a Jason Todd, en Watchmen and Philosophy me enganchó todo lo relacionado a Adrian Veidt. Este libro se centra mucho en los dilemas vinculados a Rorschach (su visión de la justicia) y Ozymandias (su mirada ética hacia la vida), y plantea algunos otros dilemas del resto de los personajes. Si hubiese más análisis en la figura del Comediante, este texto hubiese sido perfecto (no olvidemos que el Comedian es el único que estuvo presente y en actividad en toda la historia, desde los Minutemen de los ´40, pasando por los Crimebusters de los ´70 hasta llegar a los Watchmen del ´85).
Watchmen and Philosophy deconstruye los dilemas éticos, morales y filosóficos a los que se tienen que afrontar estos “héroes”. Desde la guerra nuclear a la utopía, desde la autoridad gubernamental a la moralidad de la humanidad, este texto intenta responder cuestiones filosóficas que se han planteado muchos quemados amantes de la novela gráfica: ¿A quiénes debemos considerar como héroes? Si las personas se auto-rotulan como héroes, ¿deberíamos confiar en ellos? ¿Quienes obtienen mucho poder tienden a traicionar a sus pares? ¿Estuvo bien Ozymandias en hacer lo que hizo? ¿Puede distinguir el Dr. Manhattan al bien del mal? ¿Existe una fuerza moral por sobre semejante ser?
Muchos de los ensayos son accesibles y penetran algunos temas como el uso y abuso de los superpoderes, la legitimidad del poder, lo inapropiado de la verdad, el feminismo superheroico, los homosexuales en Watchmen (este ensayo es tendencioso y un toque polémico), entre muchos más. La mayoría de estos ensayos se nutren de la materia prima de la novela gráfica al pararse desde otro lado que no es el del entretenimiento (si no el del razonamiento filosófico), y de paso hacen pensar -y meditar- al lector aún más allá de la obra de Moore y Gibbons.
El libro está editado por Mark D. White, un profesor del Departamento de Ciencias Políticas, Economía y Filosofía del Staten Island College. En este texto White decidió plantear las variables de análisis mediante 15 ensayos que se ubican en cuatro partes del libro:
La primera parte es llamada “Las políticas del poder: ¿Quién vigila a los vigilantes?” y tiene como eje las responsabilidades de ser un ser excepcional.
La segunda parte es “El plan Veidt: Watchmen y la ética”, y está compuesto por ensayos que tratan con la ética, mucho análisis de Ozymandias y Rorschach. Quizás la mejor parte del libro.
La tercera parte, “La metafísica del Dr. Manhattan”, se centra en los temas que atraviesan la figura de este personaje, particularmente su estado omnisciente.
La última parte titulada “Estos no son los comics de tu padre”, trata acerca de la literatura de Watchmen y el uso de los géneros.
Publicado en febrero de 2009, este libro explora y problematiza las tensiones dentro del género de historieta superheroica, así como analiza las variables de filosofía política cuando se enfoca en el dilema de la legitimidad de la autoridad. Un libro que merece ser leído dos veces, con resaltador en mano.
Gran parte de este texto de 227 páginas ayuda a aclarar que sólo el estado tiene la legitimidad del uso de la fuerza (y lamentablemente todo lo que hacen los superhéroes que no trabajan para el gobierno es ilegitimo, aunque eso no implique que este “mal”), que Rorschach tiene una visión deontológica donde sólo hacer el bien importa y no el resultado final (y así termina, en busca del bien a sabiendas de que va a morir), que Ozymandias es un megalómano y un utilitarista (pero que si su plan final fuese apoyado por los gobiernos del mundo, ¿eso lo haría legitimo?).
Este libro es un excelente complemento de la novela gráfica y desde su mirada filosófica, no importan las respuestas finales sino el cuestionar las verdades que se conocen, incluso si eso te lleva a pensar que lo que hizo Ozymandias es aceptable para el bien común y te lleva a agachar la cabeza como el resto de los Watchmen que quedaron vivos.
«Mi nombre es Ozymandias, rey de reyes: ¡Contemplad mis obras, poderosos, y perded la esperanza!».
Percy Bysshe Shelley.
Dejanos tus comentarios:
Tenés que iniciar sesión para poder comentar.