IDW Publishing anunció esta mañana que compró a la editorial Top Shelf Productions.
Ahora Top Shelf se convertirá en un subsello dentro de IDW, por supuesto centrado en novelas gráficas a cargo de autores consagrados y nuevos, con un perfil más de prestigio que de pochoclo. Las publicaciones de Top Shelf se seguirán gestando en Marietta, Georgia, donde tenía su base la editorial capitaneada por Chris Staros, quien también seguirá vinculado al sello en esta etapa.
Fundada en 1997, Top Shelf había hecho las cosas muy bien, publicando trabajos como la Essex County Trilogy de Jeff Lemire, Blankets de Craig Thompson y obras innovadoras de autores como Matt Kindt, Jeffrey Brown y James Kochalka. En los últimos años, Top Shelf se convirtió en el sello donde se refugió Alan Moore, tras su desvinculación definitiva de DC, y fue aquí donde se publicaron las nuevas aventuras de la League of Extraordinary Gentlemen, nuevos episodios de Lost Girls y reediciones de clásicos del Mago, como From Hell y Voice of the Fire.
En 2013, Top Shelf pegó un hitazo con la edición de March, un comic en el que el diputado John Lewis recuerda al Movimiento por los Derechos Civiles, co-escrito por Lewis y Andrew Aydin, y dibujado por Nate Powell. El segundo tomo se publicará el 20 de este mes.
En general, a uno le gusta que haya cada vez más editoriales, no cada vez menos. Pero la verdad es que IDW y Top Shelf se complementan muy bien: uno va más para el lado de las licencias y los comics más mainstream, y el otro ofrece un catálogo repleto de títulos y autores de los que se cansan de ganar premios. Ojalá funcione la alquimia.
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