Allá por 2008, Planeta-DeAgostini editó Cuaderno de Tormentas, una novela gráfica del siempre asombroso David Rubín. Pero no la promocionó bien, y cuando se agotó, no tuvo reediciones. Así fue como se convirtió en la «figurita difícil» en la bibliografía de un autor cada vez más leído a ambos lados del Atlántico.
Por suerte en Febrero sale una nueva edición ampliada, con nueva portada, nuevo rotulado y 21 páginas nuevas. Ahora Cuaderno de Tormentas se suma al catálogo de Astiberri, donde se publicó la gran mayoría de la obra de Rubín.
Este viaje por una ciudad terrible y fascinante es una metáfora sobre la búsqueda de la inspiración, sobre el tortuoso camino que es la creación, sobre lo peligrosa que puede ser la dependencia de las musas a la hora de encontrar historias que contar. Al mismo tiempo, es un viaje por el mapa de la ciudad más alucinante del mundo, un flashback gigante que poco a poco irá desvelando las claves.
Dice Rubín: “En 2006, una promotora musical me encargó que realizara una sección de comic para su portal de internet y aterrizó en mi cabeza la idea de Ciudad Espanto —lugar que tímidamente se había mencionado con anterioridad en uno de los episodios que componen mi primera obra, El Circo del Desaliento— con el plan de conformar un mapa y un censo más o menos estructurado de esta ciudad que habitaba en mi cabeza y de sus habitantes”.
Ahora sí, no hay excusas para no tener esta maravilla del cada vez más grosso David Rubín.
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