Petra tiene casi 100 años y vive desde siempre con Antonia, su madre de 120. Comparten frustraciones y deseos incumplidos, además de un peculiar sentido del humor. Se quieren odiándose, se sueñan lejos pero se necesitan cerca. Y esa normalidad poco normal es, justamente, lo que Petra viene a transgredir: ha decidido luchar por sus viejas ilusiones; independizarse de su madre, dedicarse a cantar e irse a vivir con Juanoli, el novio de su misma edad. Antonia hará lo imposible para convencerla de lo errado de esa decisión, aunque tenga que caer en el insulto y la descalificación para lograrlo. Pero Petra tampoco se quedará atrás en su anhelo por cumplir su sueños, y si es necesario pasar por encima del cadáver de su propia madre para lograrlo, eso mismo hará.
Así se sintetiza el argumento de Viejas Ilusiones, una de las piezas teatrales más brillantes del célebre dramaturgo Eduardo Rovner, que ahora se convirtió en una historieta dibujada por el gran Juan Bobillo y adaptada por Alejandro Farias.
Humor negro, grotesco y romance en un hermoso comic que acaba de editar Loco Rabia y que ya se consigue en comiquerías y librerías a $ 120.
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