La popularidad del shonen de Yoshihiro Togashi y su carácter de obra maldita no hacen más que aumentar a pesar de los largos parates en la publicación.

Hunter x Hunter

22/01/2020

| Por Martín Fernández Cruz

32 comentarios

shuhu001_0Es larga la lista de mangas que parecieran perpetuarse hasta el hartazgo. Berserk o Hajime No Ippo son algunos ejemplos de historias extremadamente longevas que, incluso en algunos momentos, son víctimas de largos paréntesis en los que el autor decide tomarse un descanso. Pero en los últimos tiempos, Hunter x Hunter se coronó como el eterno inconcluso, el manga que más alegrías (y sufrimientos) les da a los lectores. La historieta creada por Yoshihiro Togashi es uno de los grandes shonen del Siglo XXI, capaz de combinar la aventura con los combates de forma prodigiosa y en muchos sentidos, dejando en evidencia cuán rico puede ser un manga del Shonen Jump. Pero sus constantes pausas, a veces de años, llevaron al público a padecer una resolución que parece nunca llegará, mientras la popularidad del título y su carácter de obra maldita no hacen más que aumentar.

Los comienzos

Togashi se convirtió en un nombre importante luego de Yu Yu Hakusho. Ese manga de aventuras paranormales, que rápidamente mutó a una historia de combates más clásica, generó el interés del público por la obra del mangaka. Luego de 19 tomos, el autor finalizó su obra en la cumbre de su popularidad, decidido a no perpetuar su éxito hasta el hartazgo (ilusos quienes creímos eso). Luego de un descanso de cuatro años, en marzo de 1998 comenzó su nueva obra: Hunter x Hunter. Aquí el protagonista de la historia es Gon, un pequeño que decide obtener su licencia para convertirse en Hunter, una trabajo de gran prestigio que sólo pueden ejercer los guerreros más hábiles. Con esa excusa, el niño se somete a durísimas pruebas en las que conoce a tres amigos: Leorio, Killua y Kurapika. Con el cuarteto conformado, los héroes se unen en todo tipo de aventuras que siempre tendrán el eje puesto en las peleas.

9781591169925_manga-Hunter-x-Hunter-4-sample1Como suele ser habitual en los shonen, la aventura se va desarrollando a través de distintos arcos argumentales claramente definidos. De esa manera, el comienzo se centra en Gon y su búsqueda por convertirse en Hunter, luego un segundo arco en el que lo vemos entrenar a lo largo de los distintos pisos de la llamada Torre Celestial, y sucesivamente se suceden nuevos desafíos. En el devenir de cada una de esas tramas, el personaje va aprendiendo nuevas técnicas, va mejorando su estilo y se convierte en un guerrero excepcional que sin embargo, suele enfrentarse a rivales a quienes no puede derrotar en base a la fuerza bruta.

El toque Togashi

Hay varios aspectos que hacen de Hunter x Hunter un manga de una personalidad definida. Ante todo, hay que detenerse en el dibujo de Togashi. Algo estancado por el estilo prolijo de Yu Yu Hakusho, el mangaka comienza Hunter x Hunter con un trazo limpio, pero que por momentos se antoja algo débil. Pero poco a poco, Togashi comienza a manifestar cierta necesidad por rebelarse ante ese deber por ser prolijo, por dibujar como si su aventura fuera una más del Shonen Jump, y así comienza una revolución por partida doble. Por un lado, el autor comienza a incorporar en su manga algunos aspectos más salvajes, con relaciones de una sutil perversión entre sus protagonistas, en donde la necesidad de luchar es casi como un impulso sexual que los domina. Esa fina capa, muy poco habitual para la revista en la que se publica, Togashi la construye con un dibujo salvaje, a tono con la historia que está contando. De esa forma la narrativa se desboca, los personajes saltan de las viñetas y los trazos desprolijos se adueñan de la estètica.

7566Es indudable que Togashi es un autor inquieto, hasta casi caprichoso con el tipo de historia que quiere contar, y esa arbitrariedad en el tono de la historieta termina jugándole a favor. Según contó el propio autor, la moda de los juegos de cartas lo entusiasmaron bastante. Por ese motivo, en un punto de la historia sacó de la galera un arco argumental considerablemente extenso en el que los personajes se metían en un video juego, para visitar la denominada Greed Island. En ese lugar, los héroes debían buscar pistas sobre el padre de Gon (un prestigioso Hunter del cual su hijo no sabe nada), pero el verdadero encanto de ese juego tiene que ver con que los personajes deben obtener la mayor cantidad de cartas que puedan. Existen de distintos tipos y según cómo usen cada una, sus combates podrán definirse a favor o en contra. No es un recurso novedoso y el propio Togashi, como se mencionó, reconoce que toma la estructura de los muchos juegos similares que circulaban en el mercado. Pero lo atractivo es el trabajo del autor por pensar una cantidad verdaderamente gigantesca de cartas, anotando y armando listados al final de muchos episodios para que el lector comprenda que en ese mundo de fantasía, esas piezas son importantes y hay una infinidad de ellas.

16535029-90d4-4afc-9e38-7968bd87b679Togashi se entusiasma con las posibilidades de su propia historia, y por momentos no puede evitar empantanarse. Cuando Gon y Killua descubren el concepto del Nen y por qué dominarlo es clave para sus respectivas evoluciones como luchadores, el mangaka despliega una familia de poderes y ramificaciones que inevitablemente marean al lector, al menos en una primera leída. Como sucede con las cartas, el autor construye un mundo de poderes que excede por mucho lo que sucede en las páginas del manga, pero lo hace con el objetivo de darle detalle al universo de su ficción. Y ahí es donde aparece el gran encanto de la saga. Togashi quiere darle verdad a su historia, quiere construir un mundo que crezca y se extienda más allá de lo que sucede en lo estrictamente vinculado a los personajes centrales. Y probablemente por esa meticulosidad es que el autor no puede evitar sumergirse en esos eternos paréntesis que tanto sufrimos sus lectores.

Con 36 volúmenes publicados, dos largometrajes animados y otras dos series de televisión (la original de poco valor, pero la segunda mucho más lograda y fiel al original), Hunter x Hunter es uno de los mangas imprescindibles del siglo XXI. Togashi logró combinar en un molde de aventuras una historia atípica, realizada con un dibujo que desborda originalidad y que contiene una brutalidad muy poco habitual para este tipo de mangas. Una vez más y gracias a un gran autor, el shonen demuestra por qué es un género sin límites.

Compartir:

Etiquetas: , ,

Dejanos tus comentarios:

32 comentarios