Mighty ´80s

Checkmate, el Suicide Squad, Captain Atom, Peacemaker, Firestorm y Manhunter en un crossover que sacudió a los fans de DC.

The Janus Directive

12/07/2024

| Por Diego Accorsi

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Bienvenidos a la sección que se pasea por la prolífica y asombrosa década de los ‘80 para desempolvar las joyas de una inmensa corona o descubrir los bofes más recalcitrantes que se produjeron en el mercado de los superhéroes yankis. En estas expediciones cuasi-arqueológicas indagaremos revistas, libros o el formato que fuere, publicados entre Enero de 1980 y Diciembre de 1989, para ver quiénes brindaron su arte y cómo se desarrollaban las aventuras en ese período. Pasemos directamente al objeto de análisis de esta entrega.

  • Título: The Janus Directive
  • Editorial: DC Comics
  • Formato: saga entre varias revistas mensuales
  • Período: Abril a Junio de 1989
  • Autores: Paul Kupperberg, John Ostrander, Kim Yale, Cary Bates, Greg Weisman, Steve Erwin, John K. Snyder III, Rick Hoberg, Doug Rice, Tom Mandrake.
  • Informe: El gran guionista John Ostrander venía rompiéndola en el Suicide Squad, pero el tema de los super-seres y las agencias del gobierno se expandía por las páginas de otros comics de la DC y en algún momento tenían que poner un poco de orden. Qué mejor manera para esto que hacer un buen bardo, y ahí entran las capacidades de los editores Robert Greenberg (del Squad), Jonathan Peterson (de Checkmate), con extras invitados como Barbara Kesel (de Manhunter), Dan Raspler (de Firestorm)- estos dos títulos tenían a Ostrander como guionista titular- y Denny O’Neil (de Captain Atom).

El prólogo que da comienzo a esta saga es el nº26 de Suicide Squad (por Ostrander, Grant Miehm y Karl Kesel) que, si bien gira en torno a la última misión de Rick Flagg, presenta una punta muy importante para la saga: Amanda Waller vs. Amanda Waller. El capítulo 1 de la Janus Directive es el nº15 de Checkmate que -tras una gran portada de Gil Kane- esconde un guion triste y unos dibujos lamentables, a cargo de Paul Kuppeberg, Steve Erwin y Al Vey. Tras 23 páginas intrascendentes y olvidables cuanto menos, esto empieza a presentar la saga recién en la última página cuando cae Amanda a avisar que hay una guerra interna entre agencias secretas gubernamentales; una estafa casi.

La saga arranca en serio en el nº27 de Suicide Squad (portada de Kesel para una historia de Ostrander y Kim Yale con dibujos de un novato John K. Snyder III con poca ayuda del entintador Pablo Marcos), ‘Scattermove’. Amanda sabe que o la Force of July o el Proyecto Atom va a intentar atacar a la Task Force X, y en vez de sentarse a esperar, lanza un ataque contra ambas agencias. El Squad tiene que inutilizar a la Force of July y recuperar la Máscara de Medusa del Psycho-Pirate que obtuvieran en el Especial Outisders-Infinity Inc. Como típica misión del Squad las cosas no salen tan bien y varios de la Fuerza son boleta, mientras Peacemaker y los Checkmate van contra el General Eiling y la base de Captain Atom. Volvemos a Checkmate 16 (Shadow Knights), donde un Kuppeberg que no puede alcanzar los objetivos tiene como dibujante invitado a Rick Hoberg, mal entintado por Al Vey para otro número artísticamente muy pobre. Checkmate se le da vuelta a Amanda y manda a su gente a Belle Reve… pero fracasa, mientras Lois Lane empieza a husmear en el asunto y Eiling le devuelve el favor a Checkmate al mandar a Major Force a hacerles una visita. Por supuesto, Peacemaker no se va a quedar sentado y sale al combate.

Suicide Squad nº28 (Death Game) presenta a más espías (Cherie y John Chase, los padres de Danny, el casi Teen Titan), al Sarge Steel y a un enemigo en las sombras con referencias ‘ofidias’. El Squad va contra Checkmate y se encuentran a los dos descerebrados peleando desde el capítulo pasado. Esto sigue en el nº17 de Checkmate (A Hard Day´s Knight) por el mismo equipo “creativo”, con más Lois Lane, más agentes boleteados por el gran Naga-Naga, más boludeces de Black Thorne y más rosca entre los altos mandos de las agencias gubernamentales involucradas. Saltamos al capítulo 6 en las páginas del nº14 de Manhunter (por Yale, Ostrander, Doug Rice y Marcos) que cuenta cómo Amanda involucra a Mark Shaw y éste termina infiltrado en la nave enemiga que orbita la Tierra. Firestorm nº86 es el siguiente capítulo-delito, ya que en apenas dos cuadritos un ex médico de la prisión de Louisiana pide auxilio por un problema y descubre que allá están peor y al final, le pide ayuda a Firestorm para que vaya a darles una mano. ¿Por qué allá están tan mal? Bueno, eso lo vemos en el nº29 de Suicide Squad 29, (“Heavy Squad”, por los mismos que el número anterior), en donde la base de Waller es atacada por Peacemaker y el Atom Project más Checkmate. Llega Firestorm, pero todo se resuelve cuando Amanda se calza la Medusa Mask y los calma. Revela la trama secreta detrás de la Directiva Janus, el plan de Kobra para que se eliminen entre ellos y cómo ocupó el rol de su doppelganger que debía ocupar su rol. Ahora sí, todos juntos contra el malo.

Capítulo 9, Checkmate 18, Knight Fight (de los mismos ladris que la primera parte y casi tan mala), donde Shaw les pasa la data de dónde está la nave secreta de Kobra y George Bush une a las agencias bajo el mando de Sarge Steel para un ataque combinado. Aparece Flo, un personaje del Squad afroamericano, pero como nadie supervisa, acá está rubia y blanca, pero bueno, sigamos que con Captain Atom, Major Force y Firestorm, empieza el ataque a la nave. Kobra se las ve negras y decide destruir todo lo posible, caer encima de una ciudad y matar a todos los que pueda. Tarea pendiente para Ostrander, Yale, Snyder y Kesel, que en la décima parte (Suicide Squad 30) nos muestran el ataque final, con un par de bajas, pero el triunfo de los ‘buenos’. Después, Bush reacomoda las agencias del gobierno que manejan super-seres y pasamos a un bochornoso epílogo que nos lo vendían como capítulo 11 en el nº30 de Captain Atom (guion de Cary Bates y Greg Weisman, lápices de Rafael Kayanan y tintas de Romeo Thangal). Acá no pasa nada relacionado con la saga, excepto tres cuadritos donde el Capi se despide de Nightshade, pero sin hacer referencia a la Janus Directive.

​En realidad, donde termina la saga, verdadero epílogo, es en el nº87 de Firestorm, de Julio del ’89, donde el guion de Ostrander y los dibujos de Mandrake nos muestran una suerte de despedida de todos los involucrados tras la pelea final. Una pena que ni siquiera para el Trade Paperback que compila la saga (Suicide Squad: The Janus Directive) hayan corregido esta patada en las bolas. Pero bueno, no se le pueden pedir peras al olmo ni buenas sagas a cinco editores de DC juntos. Aplausos para Yale, Ostrander, Kesel, Snyder y no mucho más.

 

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