¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

NOTAS

The Complete Frank Miller´s RoboCop Omnibus

Se complicó el tema de tener en un solo tomo las adaptaciones de los guiones que escribió Miller para las secuelas de RoboCop.
|
Martes 08 de julio, 2025

Allá por Diciembre de 2016, BOOM! Studios lanzó un portentoso Omnibus con 404 páginas, llamado «The Complete Frank Miller RoboCop». Era un lindo libro de tapa blanda, que costaba u$ 40 y traía las dos miniseries basadas en los guiones que escribió Frank Miller para las secuelas de RoboCop, la famosa película dirigida por Paul Verhoven en 1987.

Algo de lo que escribió Miller para RoboCop 2 llegó a la pantalla grande (de hecho el propio autor hace un cameo en el film), pero los cambios que metió alguien del estudio fueron tantos, que se justificaba (ponele) publicar una versión en comic más afín a lo que había soñado el autor de Sin City. Con esa consigna, la editorial Avatar lanzó en 2003 una miniserie llamada «Frank Miller´s RoboCop» cuyos nueve números tardaron casi tres años en salir. Los guiones corrieron por cuenta de Steven Grant, los dibujos estuvieron a cargo de Juan José Ryp, y Miller supervisó, dio el visto y dibujó varias portadas. Y en 2013, BOOM! recogió el guante y llamó a Grant para que adaptara al comic el tratamiento que presentó Miller para RoboCop 3 (The Last Stand), que no estuvo ni cerca de ser trasladado a la pantalla grande. Esto se convirtió en una miniserie de ocho episodios, dibujados por el turco Korkurt Oztekin, el último de los cuales ya no lleva las firmas ni de Miller ni de Grant.

Nueve episodios de Avatar y ocho de BOOM! arman un lindo masacote y eso es lo que contiene el Omnibus. Si me preguntás a mí, no tiene sentido que hayan dejado afuera el único comic de RoboCop realmente escrito por Miller, que fue el team-up con Terminator, dibujado por el maestro Walt Simonson y publicado en 1992 por Dark Horse.

Ponele que sos fan de Steven Grant porque te copaba lo que hacía en Punisher, o estás muy manija con Juan José Ryp, o simplemente querés tener cualquier cosa que diga «Frank Miller» en la portada, o sos completista de RoboCop. O ponele que no, pero te intriga acceder a versiones de esas películas (ninguna demasiado inspirada) en las que aparezcan un poco más la violencia zarpada, el humor negro y la distopía que quienes leímos el Dark Knight le sabemos apreciar a Miller. Tenemos los u$ 40, tenemos tiempo para leer todas esas páginas y hasta espacio para guardar un tomo bien gordito. El tema es quién carajo nos lo vende…

En Buscalibre no está. En Mercado Libre alguna vez alguien lo ofreció a $ 11.500, pero hoy no está. En AbeBooks no está, en MyComicShop tampoco. En Amazon alguien ofrece un ejemplar usado a u$ 200. Está loco. Uno es fan, pero no boludo. Vamos a Reed Comic, del Reino Unido… donde tampoco está.

A ver en eBay… No, tampoco. Lo más parecido es un lote con las nueve revistitas de Avatar a u$ 100. Ah, y hay varios que ofrecen el tomo que recopila esas nueve revistas, a precios que van de los u$ 86 a los u$ 132. Hojaldre: es solo lo de Avatar, no lo de BOOM!.

En castellano, nadie publicó el Omnibus (de hecho, nadie lo publicó fuera de EEUU) y lo único que se consigue es lo de BOOM!. En España, la editorial Aleta publicó Robocop: The Last Stand como «Ultimo Asalto», en dos tomos de tapa dura, de alrededor de 100 páginas cada uno. Y no están caros, el set con los dos libros se ofrecen en Mercado Libre a $ 59.000… pero te falta lo de Avatar…

Al final, no lo conseguimos completo por ningún lado… vamos a terminar buscando las 17 revistitas… o leyéndolo online, sin pagar un mango.

Y el otro tema es si vale la pena o no. La serie de Avatar es un mamarracho divertido, pero un mamarracho al fin. Juan José Ryp sobredibuja a lo pavote, mete tanto detalle, tanta texturita, que el dibujo se vuelve muy barroco, muy enkilombado, y hay viñetas tan cargadas de información que no se entiende qué nos quieren contar. Como en todos los comics de Avatar, hay un énfasis muy marcado en la violencia, la sangre y las tripas, y excusas muy extremas (algunas directamente irrisorias) para que la vestimenta de las mujeres escasee más que los dólares en el Banco Central. El atractivo de esta versión es que tiene algunos momentos que si viste la peli te van a resultar familiares, y un montón que están buenos, que son impactantes, y no se entiende cómo los dejaron afuera del largometraje. Pero la palabra clave es «no se entiende». Es todo un gran bolonki de explosiones, tiros y nerca al aire, que no tiene ni la profundidad irónica del film de Verhoven ni la narrativa cautivante de los buenos comics de Miller. ¿Es más Miller que lo que se vio en la versión fílmica de RoboCop 2? Sí, obvio. Y es un Miller con pilas, no uno que salió a chorear. Y además es una buena aventura de RoboCop. Pero el traspaso al comic es torpe, por momentos confuso y por momentos tan exagerado que traiciona a esa bajada de línea sutil que Miller quiso introducir en la trama.

Por su parte, la serie de BOOM! adolece de un dibujo más simple, más esquemático, que es más claro, más funcional al relato, pero que estéticamente no tiene mucho atractivo. Al lado de Ryp, Oztekin es un dibujante muy del montón, sin alma ni personalidad. No es exactamente un muerto, pero le falta un montón. Y el guion es flojo, no sé si porque Miller lo despachó así nomás, o porque Grant no puso huevos en la adaptación. Pero es una historia más trillada, más blandita, más predecible, ya sin esos ecos del Dark Knight que hacían relucir al tratamiento de Miller para la peli anterior. Sigue siendo medianamente aceptable, mejor que la bazofia que se llegó a filmar (y que en EEUU se estrenó directo a video, porque era tan chota que si iba a los cines el fracaso iba a ser monumental), pero no le llega ni a los talones ni a la peli original, ni al team-up con Terminator, sin ir más lejos. Ni siquiera tiene el atractivo morboso de las tripas al aire y las minas casi en bolas.

De todos modos, está piola que exista un tomo con todo el material de Steven Grant basado en los tratamientos que escribió Miller para las películas, y si yo tuviera los derechos para publicar comics de RoboCop, sin dudas reeditaría el Omnibus de BOOM!, porque -más allá de la calidad de las historietas- estaba muy bien hecho.