Fantasías Adaptadas

Nuestro primer descuartizamiento se trata –precisamente- de la película que en algún momento pretendió adaptar la historieta de Alan Moore sobre Jack el Destripador...

From Hell

04/04/2013

| Por Diego Accorsi

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58_1Bienvenidos a esta nueva sección. Cabe aclarar que aquí no analizaremos al cine como arte en sí, no valoraremos su calidad artística, ni juzgaremos sus logros en cuestión de recaudación o cantidad de premios y nominaciones. Aquí lo único que cuenta es su relación con el producto que extrapoló de otro medio para adaptarlo y convertirlo en una película. Pasamos a nuestro primer descuartizamiento y se trata –precisamente- de From Hell, la película que en algún momento pretendió adaptar la historieta de Alan Moore sobre Jack el Destripador… pero qué pena.

Qué lástima que los intereses y las obligaciones hollywoodenses se hayan metido de por medio de una forma tan poderosa para destruir la adaptación de un gran cómic y convertirla en una peli cinco puntos. Y digo qué pena porque FROM HELL (2001) tenía un buen equipo tras las cámaras (los Hughes Bros.), excelente escenografía, vestuario, iluminación y un elencazo, pero cayó bajo la picadora de ideas y forzosamente tuvieron que amasar al comic con tres imposiciones, una más jodida que la otra, una más molesta que la otra, una causante de más daño a la adaptación que la otra. Veamos. Imposición hollywoodense nº1: si el protagonista –que sin mucho más sentido que “lo tengo a Johnny Depp” pasa a ser el Inspector Abberline- se droga con opio para tener visiones y resolver los casos (en la obra original, el que tenía visiones del futuro era “Jack” mientras cometía los asesinatos-rituales místicos, pero, bueh), tiene que tener un final acorde con su pecado, no puede terminar bien, por drogón. from_hell_front_1Es casi una ley. ¿Se droga? ¿Infringe de alguna manera la “ley moral” U.S.A.? Castigo. No puede terminar feliz sin pagar por su “crimen”. Pero esto es leve, pasaría por alto, avancemos a la segunda presión corporativa sobre el guión: interés romántico. Ah, sí, señora, señor, si hay protagonistas carilindos, tiene que haber atracción sexual, amorío forzoso y ella, aunque sea una puta pobre destrozada por la vida, está bárbara (Heather Graham), se enamora del policía Depp y se besan en los callejones. Creo que de leer esta última oración Alan Moofeta se estaría ahorcando con la barba trenzada, pero en la sórdida Londres victoriana puede florecer el amor aunque el autor de la obra no lo contemple jamás. ¿Hay un policía que hacemos viudo y traumado? ¿Hay cuatro prostitutas horribles y una hermosa? Listo, sale con fritas, se aman. Por supuesto, por el castigo de la imposición Uno, no pueden terminar felices, pero hay un innecesario romance que crea un clima choto a lo largo de toda la película.

Alan Moore Eddie Campbell From Hell panelsY ahora sí, pasemos a la traición más grande a la obra de Moore, a la que llevaría a esta “adaptación” al cadalso más profundo y hediondo: Who dunnit? ¡Ah! ¡Horror! ¿A qué empresario hijo de puta se le ocurrió que From Hell de Moore y Campbell tenía que convertirse en una película de misterio con la intriga de “quién lo hizo”?. No, maestro, uno de los más grandes hallazgos de From Hell es precisamente que desde el principio uno sabe quién cuernos es el asesino y éste se vanagloria de ello a lo largo de todo el ladrillazo de páginas en blanco y negro. Lo grosso es cómo Moore se las arregla para llevar adelante una historia tremenda sabiendo de antemano quién es Jack el Destripador; no corre el misterio boludo que generalmente se asocia a este asesino, “oh, ¿quién será?”. El mago de Northampton te tira la carne al asador y explica su teoría a la perfección, sin necesidad de generar intriga, posibles sospechosos, personajes ambiguos ocultos o falsas pistas, en un comic que te mantiene en vilo cientos de páginas a pesar del inglés antiguo y arrabalero de las putas, y ese dibujo sórdido al que apela Campbell para ensuciar el ambiente y contagiarte la mugre y la pobreza de la Londres de fin de siglo XIX. “Oh, ¿será el Jefe de la policía fromhel1secreta? ¿será el joven doctor?”… Pero tomatelás, idiota. Tres imposiciones de estudio, tres metidas de pata que se conjugan para destruir un comic al pasarlo a la pantalla grande. Ojo, si no existiese un comic genial llamado From Hell, esta película sería una buena película de misterio con un giro interesante sobre Jack el Destripador, pero como adaptación, se merece el más denso de los escupitajos otoñales.

Como broche, no nos queremos ir sin antes ofrecer un contraejemplo, una película que recomendamos y mostramos como modelo de cómo se debe adaptar un cómic: The Dark Knight Returns (2012), la primera parte de la versión animada. Nada más.
Nuevas fantasías adaptadas cuando veamos que postearon muchos comentarios en esta sección. Hasta la próxima.

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