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NOTAS

Flash

Si seguís desde hace décadas el linaje de los velocistas escarlata de DC, te han hecho llorar al pedo muchísimas veces.
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Viernes 15 de abril

Entre las muertes de los personajes de los comics, ninguna más potente que la que sucede en un gran crossover, cuando el héroe debe sacrificarse para salvar todo el universo, o en este caso, el multiverso. Estamos en Noviembre de 1985 y para detener al Anti-Monitor en su plan de destruir la realidad toda con su mega-cañón de anti-materia, Barry Allen, el Flash de la Silver Age, el tipo que fue capaz de –convertido en nube- vibrar y llover para reintegrar su cuerpo, viajar por el tiempo o por entre dimensiones, un tipo desproporcionadamente poderoso con el que la editorial ya no sabía qué hacer, se sacrifica y en una carrera final que lo propulsa por el tiempo y el espacio, destruye el arma y es consumido por la Speed Force. «A Flash of the Lightning!» escrita por Marv Wolfman, con lápices de George Perez y tintas de Jerry Ordway nos conmovió con la intensa defunción de un gran héroe de la DC Comics que siempre fue recordado y que, gracias a esa carrera final por el tiempo, pudo aparecer como invitado cada tanto, en los segundos previos a su muerte. Todos lo lloramos y acompañamos en su pesar a Wally West, su sobrino y sidekick que debió continuar el legado y ponerse el traje escarlata. Toda una familia de velocistas se lamentará su perdida y crecerá bajo su legado. Incluso en la Infinite Crisis de 2006 peleará junto a su nieto Bart, venido del futuro. Pero- paren las rotativas- nos vamos enterando de que su alma está atrapada en la Speed Force, no es una muerte definitiva total.

Mientras veamos cómo le fue a Wally en su rol de Flash.

Estamos en Septiembre de 1994 y se viene la mega-saga que cambiará el universo para siempre… para peor: Zero Hour: Crisis in Time, una batata cocinada por Dan Jurgens que va numerada del 4 al 0. Ya en su primera entrega, Flash viaja al Siglo 64 a frenar una ola de entropía, pero no logra escapar a tiempo. En el nº1 es turno de la muerte del primer Flash, el veterano Jay Garrick que se deshace y desaparece. Pero guarden los pañuelos, acá me avisan que al mes siguiente, en la revista mensual de Flash, arranca la saga Terminal Velocity y ambos vuelven como si nada. Y atenti, esta saga escrita por Mark Waid con dibujos de Carlos Pacheco promete emociones fuertes. Para el nº 99 de Flash, (Marzo del ’95) Wally enfrenta a Kobra mientras que la Speed Force lo reclama. Cuando él cree que ya está todo bien, es chupado por la Fuerza de la Velocidad y acaba con su existencia. Gran final para un héroe que… Que vuelve al número siguiente. Sí, señoras y señores, para el nº 100 Wally está de regreso vivito y coleando.

Otra muerte terrible que debió sufrir nuestro velocista transcurre en una saga de la JLA, Obsidian Age, donde unos protectores del pasado le cortan la pierna y luego asesinan a Wally. Chau, toda la Liga masacrada en el nº 74 de Diciembre de 2002 (guión de Joe Kelly y lápices de Doug Mahnke). Pero bueno, pasaron cosas, viajes en el tiempo, mucha magia, para el número siguiente están todos vivos de nuevo, hurra, qué lógico y normal, cómo me gusta.

El que sí muere cuando es su turno de ser Flash, es Bart “Impulse” Allen, dentro de las páginas de Flash: The Fastest Man Alive nº 13 (Agosto de 2007, por Marc Guggenheim y Tony Daniel). Inertia (su clon malvado) y los Rogues muy sacados lo asesinan en “Full Throttle: Conclusion”. Una pena.

Al año siguiente, 23 años después de su impactante muerte en Crisis… ¡vuelve Barry Allen! ¿Cómo? ¿Por qué? Bueno, Grant Morrison en Final Crisis nº2 (Agosto 2008, dibujos de J.G. Jones) abre la puerta y el Flash más querido le gana al Black Racer y escapa de la muerte. La presentación viene en la DC Universe 0, y el regreso a la gloria de la mano de Geoff Jones y Ethan van Sciver en The Flash: Rebirth, una miniserie de seis partes. A partir de ahí, el abuelo cubrirá al nieto muerto en el rol del Flash protagónico de su propio título. Porque Bart Allen sí quedó muerto… ah, no, pará, pará, ¿cómo que lo resucitan en Final Crisis: Legion of 3 Worlds nº 3? Eso es una miniserie de Abril de 2009 donde la Legión combate contra Superboy Prime, escrita por Johns y dibujada por Perez. Bueno, sí, me confirman por cucaracha que Impulse es rescatado de la Speed Force por su prima Xs, no murió, eh.

Bueno, al menos en la Tierra-22, un universo paralelo que se desprende del juego de Playstation “Injustice”, Flash muere, y en el que viene del “DC Universe Online Legends” Flash y Green Lantern están peleando contra Black Adam y cuando los héroes se acercan, convoca un rayo al grito de “¡Shazam!” y los boletea a los dos. Acá sí, chau Flash (nº 1 del volumen 1, Abril de 2011, por Wolfman y Bedard, con dibujos de Adriana Melo y Howard Porter).

Pero volvamos a la “continuidad verdadera” del DCU. Decime que se murió Flash. Llegamos a Junio de 2014 y una pandilla de malvivientes integrada por Brain Azzarello, Keith Giffen, Jeff Lemire y Dan Jurgens nos traen The New 52: Futures End, que en su nº 0 nos presenta un futuro posible donde Flash se enfrenta a Frankenstein –que tiene la cabeza de Canario Negro cosida al pecho- y con un grito sónico lo desintegra. ¿Cuánto duró muerto? No importa, porque es un futuro alternativo.

Listo, chau, quedamos así. Wally, Jay, Bart, Barry, no importa cómo se llame bajo la máscara (o el casco), Flash tiene la tonga de la Speed Force y eso lo hace prácticamente inmortal, capaz de ser revivido le pase lo que le pase (sin contar los viajes en el tiempo, las dimensiones paralelas y otras fuentes inagotables de excusas para resucitar personajes). Con héroes como éste, no hay funeraria que aguante.

Reflexión Final: Estaba tan bien muerto en Crisis…