Suele ocurrir a veces que algunas obras de algún autor de renombre caen en el olvido por alguna razón, tal vez por el hecho de que en el historial de su creador hay tantas otras obras de gran nivel, que una de ellas termina eclipsada. Es el caso de Rune, serie co-creada por Chris Ulm y el legendario Barry Windsor-Smith.
Rune se publicó a través de Malibu, como parte del sello Ultraverse. a mediados de los ´90, y es una de las cosas más destacables de aquella editorial, ya sea por la calidad, como por lo diferente que era al resto de lo que ofrecían. De hecho, hasta se podría decir que como título era bastante distinto a la mayoría, pero eso es lo que pasa cuando hay un autor de la talla de Barry Windsor-Smith involucrado en el proyecto. Alguien así, siempre marca la diferencia.
Rune narra la historia de un poderoso ser alienígena que llega a la Tierra miles de años atrás. Tras asumir las identidades de varias deidades, se enfrenta a los guerreros de distintos pueblos donde fue reverenciado y considerado un dios. Este personaje vive miles de años en nuestro planeta hasta que todo cambia para él cuando contrae cáncer durante los años del desarrollo de la tecnología atómica. A partir de entonces es que deja de ser inmortal y comienza a deteriorarse, destinado a morir lentamente con el correr de los años. Todo esto es descubierto por una organización secreta conocida como Aladdin, dirigida por el General Ryder, quien se vale de una inteligencia artificial llamada Genie para encontrar a dos muchachos idénticos, pero criados en distintas casas, llamados Erik y Noel, quienes parecen estar conectados con Rune a través de sueños. Como sea, Rune intenta atacar a uno de ellos, que son rescatados (o reclutados) por la organización Aladdin. Genie intentará absorber a Rune pero descubre sorpresivamente que no es posible. Genie es absorbido por Rune, y es a través de los conocimientos de Genie que Rune descubre el pasado del General Ryder.
Con el correr de los números se irán descubriendo el origen y objetivos de la organización Aladdin y de su líder el General Ryder, así como la importancia de Erik y Noel, y por supuesto, el enfoque está puesto en la lucha por la supervivencia de Rune, quien busca hacerse con un nuevo cuerpo para poseer y reemplazar el suyo, que está cada vez más débil y deteriorado.
Rune es un título que combina misticismo, horror, ciencia ficción, conspiraciones, referencias tanto históricas como mitológicas, todo eso vislumbrado a través del arte de su incomparable creador. El volumen original de Rune se extiende a lo largo de un especial “ashcan” (una suerte de número preview que solía publicarse en los ´90) y nueve números mensuales, de los cuales, solo seis son dibujados por BWS, y son lo que realmente valen la pena. También hay un par de especiales y varias miniseries, pero principalmente son de la etapa marveliana de Malibu, por lo que la historia de Rune pasa a estar entrelazada con personajes del Universo Marvel, especialmente Silver Surfer y Adam Warlock. En mi opinión es un desperdicio, porque la historia de Rune tal como la había visualizado su creador, es lo que se ve en el primer arco de la serie original, desde el ashcan hasta los primeros 6 números de la misma. El resto no es más que relleno.
Mientras Smith se encuentra trabajando en la serie, básicamente se encarga de la mayor parte del proceso creativo, y sus créditos van desde co-guionista, dibujante, colorista y creador (junto con Chris Ulm, que además es el otro co-escritor), con lo que su intervención en el desarrollo de la obra es casi total, y el propio Smith ha dicho que éste es uno de los trabajos de los que se siente más orgulloso. El color también corre a cargo del propio BWS, y se nota ya que utiliza la misma paleta de colores que en el arco “Weapon X” de Marvel Comics Presents, pero acentuados en esta oportunidad por la tecnología de color de Malibu (que fue la principal y verdadera razón por la que Marvel compró la empresa en el ‘95). El resultado es esa sensación entre violenta y psicodélica que tan bien transmite Smith en cada página y que es parte de su impronta.
Después de que el Malibu es adquirida por Marvel, salen algunas historias más de Rune, pero sin Smith en la ecuación, por lo que ya no tiene mucho sentido seguir al personaje. Gran parte de la personalidad que tenían tanto el comic como su protagonista, se la imprimía el arte de su creador. Se pierde mucho cuando Rune cae en manos de otros dibujantes.
Lamentablemente, existen problemas legales de derechos de autor que impiden que Marvel publique al día de hoy alguna edición recopilatoria que reúna lo realizado por Smith en esta serie, por lo que no queda otra que conformarse con intentar conseguir (de alguna forma, si fuera posible) los issues individuales.


